100 activistas ocupan 4 centrales térmicas de carbón en Italia durante la cumbre del G8.
Con está ya son cinco las centrales térmicas de carbón italianas
ocupadas por Greenpeace desde ayer por la mañana. La organización
quiere llamar la atención sobre la necesidad de un acuerdo de los
líderes reunidos para afrontar de forma definitiva y contundente la
lucha frente al cambio climático.
"Los líderes actúan y los políticos sólo hablan",- ha declarado
Raquel Montón, responsable de la campaña Cambio climático y Energía
de Greenpeace. "Pese a que el acuerdo es novedoso para el G8, y
para países como Estado Unidos, Canadá, Rusia y Japón, no
representa ningún avance para los 124 países que ya apoyaban este
compromiso".
Greenpeace considera insuficiente la referencia del G8 a la
necesidad de mantener el aumento de la temperatura global por
debajo de los 2ºC, sin establecer un plan claro ni el dinero o los
objetivos de reducción de emisiones que deben contribuir a alcanzar
esta meta.
Acciones de Greenpeace
-Hasta este mismo momento, cinco centrales térmicas permanecen
ocupadas por Greenpeace en Italia, en las que los activistas están
pintando mensajes apelando al liderazgo climático del G8.
-A primera hora de hoy, activistas han subido a la central
térmica de Civitavecchia (cerca de Roma), la primera central
térmica de carbón que se construye en 20 años.
-Hay doce activistas detenidos, cinco en la central de
Civitavechia y siete en la central de Porto Tole. La central de
Brindisi sigue bloqueada por los activistas y sin poder operar con
normalidad.
-Los activistas de Greenpeace también siguen ocupando las grúas
del embarcadero cercano a la central térmica de Marghera, donde la
organización impidió ayer que el buque carbonero Bulk Brasil
descargara su mercancía, proveniente de Sudáfrica.
-También hay que añadir las acciones realizadas en las últimas
horas en Estados Unidos, Francia o Rusia.
Sin embargo, Greenpeace resalta que cada líder político
individualmente puede marcar la diferencia y despertar las
negociaciones climáticas internacionales del letargo en el que
están sumidas. "Zapatero puede marcar la diferencia, y su
compromiso y su trabajo puede acercarnos un poco más al acuerdo que
es necesario alcanzar en Copenhague si queremos salvar el clima,
cuando sólo quedan 150 días para que comience esta cumbre de la
ONU", ha concluido Raquel Montón.
Greenpeace pide a los líderes del G8 que incluyan en su
acuerdo:
- El aumento de la temperatura media global debe mantenerse tan
lejos como sea posible de los 2ºC (tomando como referencia la
temperatura de la época preindustrial) para evitar los peores
efectos del cambio climático.
- Que las emisiones globales de CO2 deben alcanzar su máximo en
el año 2015 y disminuir hasta cero tanto como sea posible en el año
2050
- Un compromiso del G8 en su conjunto para reducir las emisiones
en un 40%, tomando como referencia los niveles de 1990.
- La aportación del G8 de 74.000 M€ de los 110.000 M€ anuales
necesarios para que los países en desarrollo sean capaces de
combatir el cambio climático, financiar la protección de los
bosques y adaptarse a aquellos efectos que ya son inevitables.
- El establecimiento de un mecanismo financiero para detener la
deforestación y las emisiones asociadas en todos los países en
desarrollo para 2020 y alcanzar la meta de cero deforestación en el
Amazonas, el Congo Basin e Indonesia para 2015.