Comunicado de prensa - febrero 15, 2005
En respuesta al anuncio por parte de Corea de Norte de abandonar indefinidamente las negociaciones a seis bandas sobre su programa nuclear, Greenpeace ha pedido a Corea del Norte que vuelva al seno del Tratado de No Proliferación Nuclear y que envíe una misión diplomática a la Conferencia de Revisión de este Tratado que tendrá lugar en Nueva York el próximo mes de mayo.
Kim Jong II Secretario General de la República Democratica de Corea del Norte
Aunque no ha sido una sorpresa, a Greenpeace le preocupa que
Corea del Norte haya admitido poseer armas nucleares. Las
negociaciones a seis bandas entre las dos Coreas, Estados Unidos,
Rusia, China y Japón comenzaron en 2003 pero están paralizadas
desde el pasado mes de septiembre. Estas negociaciones han estado
condicionadas por la hipocresía y la falta de compromiso de todas
las partes. Mientras que China, Rusia y los Estados Unidos
incumplen sus obligaciones internacionales de desarme y están
renovando activamente sus arsenales nucleares, Corea del Sur se ha
visto envuelta en una controversia sobre sus experimentos con
material nuclear. Al mismo tiempo, Japón cuenta con una reserva
doméstica de 5 toneladas de plutonio y tiene planes de abrir una
instalación de reproceso en Rokashu-Mura que podría separar mucho
más plutonio.
En opinión de Greenpeace, con cada parte acusando a la otra de
intransigencia, la única manera de avanzar ahora es que Corea del
Norte vuelva al seno del Tratado de No Proliferación, después de
haberlo abandonado en 2003. "Solamente volviendo a las normas de la
diplomacia internacional bajo los auspicios de la ONU habrá una
salida creíble a la perspectiva de proliferación en la región",
afirma la organizacion, que invita a través de su página web de Internacional a dirigirse al
Embajador en Naciones Unidas de Corea de Norte, pidiéndole que
trabaje a favor del desarme nuclear de Estados Unidos y las demás
potencias nucleares desde dentro del Tratado de No Proliferación y
no al margen del mismo.
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