Activistas de Greenpeace "cierran" la nuclear de Vendellós-2 para recordar a Zapatero su compromiso de abandonar la energía nuclear. En la imagen activistas dentro de la central de Vandellós-2.
Son múltiples los ejemplos pero citando sólo algunos de ellos se
ve esta falta de fiabilidad: los constantes fallos de la central
nuclear de Cofrentes (Valencia); el escándalo del suceso de rotura
del sistema de refrigeración de servicios esenciales de Vandellós-2
(Tarragona) -el más grave de la historia de la industria nuclear en
España después del accidente de Vandellós-1 en 1989, según el
propio Consejo de Seguridad Nuclear; el reciente hallazgo, (también
en Vandellós-2) de piezas metálicas sueltas en su circuito de
refrigeración, procedentes del interior de la vasija del reactor;
los problemas de protección radiológica de Ascó-1 (Tarragona); o
los graves problemas de seguridad que arrastra la obsoleta central
nuclear de primera generación de Santa Mª de Garoña (Burgos)
-aparición de grietas por corrosión en los tubos que conducen las
barras de control al interior de la vasija del reactor- que ha sido
recientemente sancionada con un Nivel 1 por un problema de cultura
de seguridad.
El mal funcionamiento de las centrales nucleares españolas se
refleja en los 94 sucesos notificables de los cuales ha informado
el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) desde principios de 2004
hasta la fecha (el número real de incidentes de seguridad es mayor
ya que no todos los sucesos notificables se han hecho públicos en
este periodo por parte del CSN o los titulares de las centrales
nucleares).
De esos 90 sucesos relevantes para la seguridad, 26 han
provocado la Parada No Programada de alguna de las centrales
nucleares. De las 9 existentes (incluyendo Zorita, que ha cerrado
el pasado 30 de abril) las que más sucesos han registrado en los
últimos 2 años han sido las de Ascó-1, con 17 sucesos. Sigue
Cofrentes (Valencia) con 16. Juntas, han visto su funcionamiento
reducido por 9 paradas no programadas.
Las centrales atómicas catalanas sufrieron casi la mitad de los
sucesos e incidentes ocurridos entre 2004 y 2006 en el parque
nuclear español. Las centrales nucleares de Ascó-1, Ascó-2 y
Vandellós-2 acumularon 45 sucesos notificables (17, 14 y 14,
respectivamente) del total de 94 acaecidos en ese periodo. Además,
estas tres centrales sufrieron 13 paradas no previstas por diversos
fallos a lo largo de los últimos dos años. Vandellós-2,
especialmente ha tenido que estar parada 7 meses en total desde
2004. (ver Tabla 1 al final del comunicado)
Mirando en el detalle cada central nuclear se puede ver como las
instalaciones que menos seguridad de suministro han dado desde el
comienzo de 2004 han sido Vandellós-2 y Cofrentes con un porcentaje
de indisponibilidad del 27,5% y 15,3% respectivamente.
"La energía nuclear está lejos de ser
esa fuente fiable de suministro eléctrico que nos trata de vender el
lobby nuclear. De hecho, el creciente agotamiento de la vida útil de
las centrales nucleares y sus problemas de seguridad hacen que su nivel
de indisponibilidad en los últimos años sea ya significativo y con
tendencia a empeorar", ha declarado Carlos Bravo,
responsable de la campaña de energía nuclear de Greenpeace.
Según datos de la Red Eléctrica Española, la contribución del
parque nuclear español en la producción de electricidad está
perdiendo importancia en los últimos años, pasando del 30% en el
2000 al 19,7% en 2005. Este cambio es especialmente relevante si
tenemos en cuenta que el 2005 fue un año hidrológico muy seco y por
lo tanto la contribución de la energía hidroeléctrica fue muy baja.
A pesar de esta circunstancia, la producción neta de electricidad
por parte de las centrales nucleares en 2005 fue un 9,5% inferior
con respecto a la de 2004 debido a los numerosos problemas que las
instalaciones sufren cada vez más.
En lo que se lleva de año 2006, cabe destacar la escasa
fiabilidad del parque nuclear español durante el mes de abril. La
disponibilidad de las centrales ha llegado sólo al 70% debido a las
paradas no programadas de las centrales de Ascó-2, Vandellós-2, de
la parada por "mantenimiento general" y de recarga de Cofrentes
además de la parada por recarga de la central de Ascó-1. Sin
embargo, dado el exceso de potencia eléctrica instalada en la
península, fue posible seguir manteniendo la cobertura de la
demanda, demostrando de paso la prescindibilidad de estas
instalaciones atómicas. Una falta de disponibilidad global de 658,5
días en los últimos dos años y medio es como si una de estas
centrales hubiese funcionado sólo al 25%.
Tabla 1 del estudio.
Número de sucesos desde 2004 ocurridos en las centrales nucleares
españolas y número de paradas programadas y no programadas sufridas
en el mismo periodo.
Central
NuclearNúmero sucesosNúmero
paradas no programadas Número
paradas programadas
por mantenimientoNúmero bajadas de
potencia
por fallos Número paradas programadas
por recarga
Ascó-1
17
4
-
1
2
Cofrentes
16
5
1
2
3
Ascó-2
14
5
1
-
1
Vandellós-2
14
4
1
-
1
Trillo
9
3
1
-
1
Zorita
7
2
-
-
1
Almaraz-1
7
1
-
-
1
Santa
María de
Garoña
7
1
-
-
1
Almaraz-2
3
1
-
-
1
TOTAL
94
26
4
3
12