40 millones de personas dependen de los bosques para su supervivencia en la República Democrática del Congo.
Bosques primarios en la orilla del río Lukenie, en la provincia de Bandundu (República Democrática del Congo)
Bosques primarios en la orilla del río Lukenie, en la provincia de Bandundu (República Democrática del Congo)
En un informe hecho público hoy en toda Europa Greenpeace
denuncia los problemas sociales y la destrucción del medio ambiente
que están causando las empresas internacionales madereras que
operan en la República Democrática del Congo (RDC). El informe,
titulado Fragmentando el Congo (1), pone al descubierto la
corrupción endémica y la impunidad que rodea al sector forestal en
la RDC en un momento en el que debe tomar decisiones vitales para
el futuro de sus selvas tropicales (2).
Este informe se publica días antes de la próxima reunión de la
Junta Directiva del Banco Mundial que se celebrará en Washington
(3). El informe pone de manifiesto que el organismo financiero está
fallando en sus intentos por controlar a la industria maderera
mientras la selva está siendo vendida a precio de saldo bajo la
ilusión de que las talas alivian la pobreza.
Las selvas de la cuenca del Congo son la segunda mayor extensión
de bosque tropical tras la cuenca del Amazonas y una de las
defensas vitales del planeta contra el cambio climático. Un 25% del
total de emisiones de CO2 a la atmósfera por causa humana procede
de la deforestación tropical. Se ha calculado en 34.400 millones
las toneladas de CO2 que habrá liberado la deforestación de estos
bosques en 2050, 65 veces las emisiones anuales de CO2 del Estado
Español (4).
"Es un momento crítico para los bosques primarios de la Cuenca
del Congo. Las empresas madereras que operan en todo el país están
fuera de control y, a menos que el Banco Mundial ayude al Gobierno
a parar la vergonzosa subasta de estas selvas, las motosierras
esquilmarán su riqueza natural a precio de saldo", afirmó Miguel
Ángel Soto, responsable de la campaña de Bosques de Greenpeace.
Pese a que desde 2002 está en vigor una moratoria de nuevas
concesiones forestales, la industria maderera ha sido favorecida
con la asignación de cien concesiones de talas para un total de 15
millones de hectáreas (5), una superficie equivalente a la suma de
Andalucía, Galicia y Cataluña. Gran parte de los bosques asignados
son vitales para la conservación y supervivencia de nuestros
parientes animales más cercanos, el bonobo y el chimpancé.
40 millones de personas dependen de la selva en la RDC. Sólo
unos pocos se benefician de las talas. El Banco Mundial reconoce
que en los últimos tres años ninguno de los impuestos forestales
que pagan las empresas madereras ha llegado a las comunidades
forestales. Greenpeace se ha hecho con algunos de los contratos (6)
que las empresas madereras han impuesto a estas comunidades.
Algunos ofrecen regalos como paquetes de sal y botellas de cerveza
por un valor inferior a 75 euros a cambio del permiso para realizar
talas valoradas en cientos de miles de euros. Los habitantes de
estas comunidades confirmaron que las promesas de construir
escuelas u hospitales rara vez se cumplían y relataron las tácticas
de intimidación utilizadas cuando protestaban contra estas
empresas.
"Estos contratos son una vergonzosa reliquia de la época
colonial. Millones de hectáreas de las selvas tropicales del Congo
han sido adquiridas por la industria maderera a cambio de baratijas
tales como sal, machetes y cerveza. Las empresas madereras y sus
impuestos no hacen absolutamente nada por el desarrollo local",
concluyó Soto.
Greenpeace demanda, además de la cancelación de todos los
títulos de explotación forestal concedidos desde la entrada en
vigor de la moratoria de mayo de 2002, una nueva moratoria que
impida cualquier nueva concesión hasta que el sector forestal sea
saneado y controlado y hasta que se redacte y se encuentre
completamente activo un plan de uso del suelo en el que hayan
colaborado activamente las comunidades locales.
Notas:
1)
Informe en inglés disponible
2) Según un Decreto Presidencial de octubre de 2005, el Gobierno
de la República Democrática del Congo está haciendo una revisión
legal de todas las concesiones madereras del país. Esta revisión
también afecta a los concesiones otorgadas durante la moratoria de
2002.
(3) La reunión de primavera del Banco Mundial y el Fondo
Monetario Internacional se celebrará en Washington el 14 y 15 de
abril.
(4) La cifra del 25% está tomada de: Houghton, R.A. 2003.
Revised estimates of the annual net flux of carbon to the
atmosphere from changes in land use and land management 1850-2000.
Tellus 55B:378-390.
· La cifra 34.400 millones está tomada de: Justice, C.,
Wilkie, D., Zhang, Q., Brunner, J.y C. Donoghue. 2001. Central
African Forests, Carbon and Climate Change. Climate Research
17:229-246.
· Cálculo a partir de los datos de emisión del Estado
Español: 400 toneladas de CO2 equivalente al año.
(5)
Debroux, L., Hart, T., Kaimowitz, D.,Karsenty, A. y Topa, G. (eds).
2007 Forests in post conflict Democratic Republic of Congo:
analysis of a priority agenda.