Comunicado de prensa - agosto 3, 2005
La organización ecologista Greenpeace ha presentado hoy el informe Basuras en el mar en el que se denuncia el deterioro progresivo del medio marino como consecuencia del vertido de 6,4 millones de toneladas de basura en el mar cada año. Greenpeace hace un llamamiento a la acción urgente contra las basuras en el mar.
Miembros de Greenpeace bloquean dos tuberías de la factoría de Fertiberia en Huelva con el lema "no a la contaminación de la ría".
Miembros de Greenpeace bloquean dos tuberías de la factoría de Fertiberia en Huelva con el lema "no a la contaminación de la ría".
Miembros de Greenpeace bloquean dos tuberías de la factoría de Fertiberia en Huelva con el lema "no a la contaminación de la ría".
Miembros de Greenpeace recogen muestras en un vertido tóxico.
Vertidos tóxicos en el mar
"Los mares y sus criaturas se ahogan en plásticos" ha declarado
Juan López de Uralde, Director de Greenpeace en España. "Hay que
actuar, y hay que hacerlo ya. No podemos seguir cerrando los ojos
ante un problema que está matando nuestros oceános. Desde hace
treinta años en que se realizaron los primeros estudios sobre
basura en el mar el problema no ha hecho más que agravarse".
Según Greenpeace el mayor problema lo constituye la basura
flotante, que está constituida en un 90% por residuos plásticos.
Destacan por su cantidad los plásticos blandos, como bolsas de
plástico, etc. Sin embargo, el 70% de la basura vertida al mar
acaba en los fondos marinos, y sólo un 15% termina depositada en
las playas. El Programa de Medio Ambiente de Naciones Unidas ha
estimado que 13.000 piezas de plástico contaminan cada kilómetro
cuadrado de mar.
Los impactos de las basuras flotantes sobre la fauna marina
están bien documentados, siendo los más graves los drivados del
estrangulamiento y la ingestión. Se ha comprobado, por ejemplo, que
el 98% de los fulmares del mar del Norte tienen restos de plástico
en sus estómagos. La ingestión de plásticos por las criaturas
marinas les puede llevar facilmente a la muerte.
Pero Greenpeace denuncia que los impactos no sólo son
ecológicos. La basura en el mar tiene impactos sobre la salud
humana, impactos económicos o daños a la navegación.
Greenpeace demanda soluciones globales a un problema que
considera consecuencia de la creciente generación de basuras.
"La recogida de basuras en los puntos de llegada es una medida
paliativa necesaria, pero el mar sigue devolviendo máss
basuras.Sólo con políticas de residuo cero se podría empezar a
reducir este problema" ha declarado López de Uralde.