Activistas de Greenpeace bloquean un camino ilegal de 135-kilometre, en el parque nacional (Flona) de Altamira, un área protegida en los márgenes de la carretera Br-163 en el estado de Párrafos creados por el gobierno brasileño en 1988. La carretera se utiliza para las operaciones y tala de árboles ilegales dentro del área protegida
La carretera Br-163 en el estado de Pará fue creada por el Gobierno brasileño en 1988. El camino corta directamente el Parque Nacional y se utiliza para las operaciones de talas de árboles ilegales dentro del área protegida.
El Grup Balear de Ornitología (GOB) y Greenpeace han denunciado
ayer ante la fiscalía de medio ambiente de Baleares que las obras
de construcción de una pasarela de madera de ipé han producido un
grave impacto ambiental en la Amazonia brasileña, hechos
susceptibles de constituir un delito ambiental recogido en el
código penal. Según los documentos aportados en el caso, la empresa
de Vizcaya Fabricados Beylar XXI S.A. fabricó la pasarela y la
empresa López Pigueiras S.A. importó en 2005 la partida de madera
de ipé.
Las obras de modernización de los accesos al Parque Natural de
La Albufera de Mallorca, financiadas por la Consejería de Medio
Ambiente del Gobierno Balear y la Fundació pel Desenvolupament
Sostenible de les Illes Balears, han incluido la construcción de
una pasarela de madera de ipé de, aproximadamente, 260 metros de
longitud. La pasarela de madera de Ipé, madera procedente de la
Amazonia, se instaló a finales de 2005 y las obras fueron
inauguradas en enero de 2006.
En otoño de 2005 el Grup Balear de Ornitología (GOB) solicitó a
la Fundació pel Desenvolupament Sostenible de les Illes Balears que
acreditara documentalmente la legalidad de dicha madera. Dicha
institución aportó como prueba dos documentos, ninguno de los
cuales estaba emitido por la autoridad ambiental de Brasil, el
Instituto Brasileño de Medio Ambiente (IBAMA), por lo que existen
dudas razonables de su autenticidad o validad legal.
"El Govern no sabe realmente de dónde procede la madera, se ha
limitado a dar por buenos unos papeles que el contratista le ha
dado, pasando por alto que la tala ilegal, la corrupción, y la
destrucción ambiental son una constante en la Amazonia."- ha
declarado Toni Muñoz del GOB. "Es una paradoja que quien ha
financiado esta obra se autodenomine Fundació pel Desenvolupament
Sostenible de les Illes Balears".
En el caso de que los documentos aportados por el Govern fueran
ciertos, la madera de ipé procedería del Estado de Pará (Brasil),
de la empresa Madereira Sao Marcos, de una autorización del IBAMA
nº 145/2000 para el Plan de Manejo 646/97. Dicho permiso del IBAMA
fue suspendido en noviembre de 2004 ya que los títulos de propiedad
de la empresa maderera eran falsos. No debe de ser casualidad que
una empresa del mismo nombre, Madereira Sao Marcos, también en el
Estado de Pará, fuera multada por el IBAMA tras el expediente de
fecha 27/08/04 por la explotación ilegal e incumplimiento del
contrato nº 064697 del Exp. Aut. nº 145/2000. El mismo plan de
manejo del que, según el Govern, procede la madera de ipé
utilizada. Esta misma empresa fue multada cuatro veces en el
periodo 2002-2004. La madera de ipé llegó a España en julio de
2005, un año después de que la empresa maderera fuera encontrada
culpable de talas ilegales y 7 meses después de que el plan de
manejo fuera suspendido por la falsedad de los títulos de tierras.
Con estos antecedentes es fácil pensar que la madera no procede de
la legalidad.
"Documentos sin validez legal, falsos títulos de tierras, tala
ilegal, planes de gestión suspendidos. Es intolerable que una
administración utilice dinero público para comprar madera tropical
barata procedente de la destrucción social y ambiental de la
Amazonia,"- ha declarado Miguel Ángel Soto, responsable de la
Campaña de Bosques de Greenpeace.-"El Govern debería seguir el
ejemplo de otros ayuntamientos mallorquines y adoptar una política
de contratación pública que exija madera procedente de la gestión
responsable, como es la madera con certificado forestal FSC, máxime
cuando ya hay un grupo de empresas mallorquinas trabajando con
madera procedente de la gestión responsable".
NOTAS:
1.Imágenes y documentos disponibles en
http://www.gobmallorca.com/ipe.htm.
2.La certificación forestal del FSC acredita que productos de
origen forestal como madera, papel, tableros, corcho, etc., han
sido extraídos de bosques bien gestionados desde un punto de vista
social, ambiental y económico. El FSC ha certificado hasta la
fecha más de 68 millones de hectáreas de bosques y plantaciones en
todo el mundo. El FSC es el único sistema de certificación de
ámbito global y de amplia aceptación por un amplio abanico de
agentes sociales, económicos y ambientales. El FSC cuenta con el
apoyo de la práctica totalidad de las organizaciones de la sociedad
civil, ecologistas, de ayuda al desarrollo, sindicales, etc.
3.Las empresas mallorquinas importadoras, almacenistas y
transformadoras de madera FSC son Carpintería Vicens S.L. ,
Comercial e Industrial Bargar S.A., Compañía Insular Mercantil S.A.
(CIMSA), Mundiforest S.L., Fustería Font S.A. , Grup Orell y M.
Riera S.A.