El Agua es la base de la vida de nuestro planeta
Todos conocemos que mantener el grifo cerrado mientras nos
cepillamos los dientes o colocar sistemas de ahorro en la cisterna
son maneras de ahorrar agua, pero podemos hacer mucho más.
Consume productos reciclados Al consumir productos reciclados, y
reciclables, usamos menos recursos naturales, como el agua,
disminuimos la contaminación y generamos una menor cantidad de
residuos. Un ejemplo del impacto de este cambio lo podemos ver en
la obtención de papel: para fabricar 1 tn de papel necesitamos unos
115.000 litros de agua. Para una tonelada de papel reciclado se
necesitan 16.000 l, casi un 89% menos.
Consume frutas de temporada En España la agricultura consume el
80% del agua que utilizamos. Al adquirir frutas y verduras de
temporada, producidas de manera ecológica y en lugares próximos a
nuestro domicilio, estamos evitando el fomento de producciones
horto-frutícolas intensivas, que demandan grandes cantidades de
agua, lo que provoca la sobreexplotación de acuíferos y demandas de
aportes de aguas externas al lugar de su producción. Estas
explotaciones también usan más fertilizantes y pesticidas que
contaminan el agua.
Compra electrodomésticos eficientes Cuando adquiramos nuevos
electrodomésticos, debemos fijarnos en sus características técnicas
sobre eficiencia energética y ahorro de agua. Las marcas de
lavadoras y lavavajillas incorporan diferentes sistemas para
reducir el consumo de agua. Si al comprar uno de estos
electrodomésticos elegimos un modelo de bajo consumo de agua, es
decir, una lavadora que gaste menos de 71 l de agua por colada,
lograremos importantes ahorros.
Comparando los nuevos modelos de lavavajillas con los que
existían hace unos años, vemos como los nuevos modelos han reducido
el consumo de energía en un 40% y el del agua en un 60%. Podemos
considerar como eficientes aquellos lavavajillas cuyo gasto de agua
sea inferior a 1,85 l por cubierto, o 22,2 l en un equipo medio de
12 cubiertos. Hay modelos que gasta incluso 12 l por ciclo.
Exige a tu ayuntamiento un riego eficiente de los jardines Exige
a tu ayuntamiento que riegue los jardines públicos con aguas
depuradas y que garantice que las redes de abastecimiento y
saneamiento sean lo más eficientes posibles. Regar no significa
inundar, algunas técnicas como el riego por goteo, son apropiadas
para casi todas las zonas verdes urbanas. En estos lugares también
es posible instalar depósitos superficiales o enterrados de
recogida de aguas pluviales para el riego.
Elige plantas autóctonas en tu jardín En tu jardín utiliza
plantas adaptadas a la climatología de la zona, que no requieran un
aporte importante de agua. Las plantas mediterráneas han
desarrollado sistemas de adaptación a condiciones climatológicas
extremas en cuanto a falta de agua, y muchas de ellas se pueden
utilizar en jardinería. También puedes instalar sistemas de riego
localizado que aporten la cantidad necesaria de agua, así evitas
que el agua se pierda por el drenaje, arrastrando una parte de lo
minerales y la materia orgánica del terreno.
No arrojar contaminantes por los desagües No arrojar por los
desagües contaminantes como aceites (vegetal o mineral), pinturas,
barnices, disolventes o productos de limpieza, entre otros. Estas
sustancias deben depositarse en ppuunnttooss lliimmppiiooss. Tareas
tan cotidianas como hacer la colada puede producir graves
alteraciones a la calidad del agua. Al emplear detergentes que
contienen fosfato, cuya única función consiste en ablandar el agua
para mejorar así el poder limpiador, estamos contaminando el
agua.
Muy pocas depuradoras tienen tratamientos terciarios adecuados
para eliminar este nutriente. El vertido a ríos, lagos y embalses
de estas aguas deficientemente depuradas produce eutrofización, un
crecimiento masivo de algas que impiden la oxigenación del agua
matando peces y al resto de la vida acuática. Hoy en día la mayoría
de los detergentes líquidos no contienen fosfatos. Conviene leer
periódicamente las instrucciones e ingredientes, incluso si
utilizamos siempre la misma marca, ya que los comerciantes varían
las características del producto.
Instalar sistemas de reutilización de aguas en nuestras
viviendas En la actualidad, se están realizando diseños urbanos
sostenibles con el agua de lluvia. Éstos, permiten la depuración
previa y la posterior recogida de las precipitaciones, con el fin
de acumularse en depósitos subterráneos que posteriormente podrán
ser utilizados para riego y baldeo de calles y para recargar los
acuíferos de la zona.
La instalación en viviendas de sistemas de reutilización de
aguas grises es otra de las soluciones posibles. Estas aguas
procedentes de duchas, lavadoras y lavabos, pueden reducir el gasto
entre un 35% y 45% del consumo habitual de agua de una vivienda.
Como dato significativo cabe resaltar que el inodoro gasta una
tercera parte del total del agua utilizada en nuestras casas.
Además, el ahorro de agua contribuye a la reducción del tratamiento
de las aguas residuales, con el consiguiente alivio para ríos y
lagos.
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