El Esperanza llega al Ártico para denunciar el peligro de las perforaciones petrolíferas en esta zona
Cairn Energy está perforando dos pozos en la costa occidental de Groenlandia, en una zona conocida como el "callejón del iceberg". Si esta operación tiene éxito y encuentra petróleo, el Ártico podría llenarse de empresas petroleras que operarían en condiciones polares extremas. La región es conocida por sus poblaciones de ballenas azules, los osos polares, focas y aves migratorias.
La compañía tiene planes para iniciar otras dos prospecciones antes de finales de octubre. Los activistas a bordo del barco de Greenpeace Esperanza han hecho un llamamiento a Cairn para que abandone estos proyectos de perforación de alto riesgo de forma inmediata.
Un buque de guerra danés ha sido enviado a la zona de perforación y ha advertido al capitán del Esperanza que se enfrenta a ser detenido si no respeta la zona de seguridad de 500 metros alrededor de cada unidad de perforación. Actualmente, el Esperanza se encuentra anclado en el '"callejón del iceberg", situado entre la plataforma de perforación Stena Don y el barco de perforación Stena Forth, que están a 20 kilómetros de distancia. Existen informaciones que apuntan a que unidades de las fuerzas especiales danesas han sido desplegadas en las Islas Feroe con la llegada a la zona del barco de la organización ecologista.
El Gobierno de Groenlandia se niega a hacer público el plan de emergencia ante un posible vertido provocado en las perforaciones de Cairn lo que plantea serias dudas sobre la capacidad de la empresa para hacer frente a un accidente grave.
"Estar aquí y ver una enorme plataforma de perforación en este hermoso y frágil paisaje es muy chocante. Los trágicos desastres del petróleo en el golfo de México y en China este año ilustran claramente la necesidad de abandonar la dependencia del petróleo. Estas operaciones son demasiado arriesgadas y empresas como Cairn deberían abandonar el Ártico y trabajar para desarrollar alternativas seguras y limpias que realmente ayuden a reducir la necesidad de combustibles fósiles", ha declarado Leila Deen, responsable de campaña de Greenpeace y a bordo del Esperanza.
"El cambio climático ya está teniendo un impacto sobre millones de personas en todo el mundo, pero las compañías petroleras están ignorando completamente la nueva realidad a la que nos enfrentamos. Por eso, Greenpeace quiere entregar en persona un mensaje a la empresa: volved a casa ", ha añadido Deen.
Las razones que llevan a Greenpeace a oponerse a este tipo de operaciones es su extrema peligrosidad. La temporada de perforación es corta, y se termina con la llegada del invierno ártico y un engrosamiento del hielo del mar que hace imposible la perforación de pozos tanto para explotación como pozos de alivio. Un vertido en un escenario donde no se pueda llevar a cabo la perforación de un pozo de alivio podría implicar que se prolongara por un plazo de hasta dos años, y que el petróleo derramado quedase atrapado debajo de las espesas capas de hielo.
Las consecuencias ambientales de un vertido en el medio ambiente del Ártico serían mucho más graves que en los mares más cálidos como el golfo de México. De hecho, los impactos del derrame del Exxon Valdez en Alaska todavía se dejan sentir más de 20 años más tarde. En la bahía de Baffin, donde se encuentra esta plataforma, habitan entre el 80 y el 90% de los narvales del mundo. La región es también el hogar de las ballenas azules, osos polares, focas, tiburones, cormoranes, aves marinas y numerosas aves migratorias.
Mañana la empresa energética Cairn anunciará sus resultados semestrales en su sede en Edimburgo. Se espera que dé explicaciones sobre si los dos pozos de perforación que se encuentran actualmente en la bahía de Baffin han tenido éxito, así como los planes para perforar los otros dos pozos en la misma zona.
Greenpeace está pidiendo la prohibición mundial de nuevas perforaciones en alta mar y la exploración de otras fuentes de petróleo de alto riesgo no convencionales, incluyendo las arenas bituminosas de Canadá y del Ártico; la eliminación progresiva de las plataformas petrolíferas actuales; una exigencia gubernamental a todas las compañías petroleras para estar completamente aseguradas para todas las responsabilidades; el fin de subsidios a los combustibles fósiles y un aumento del apoyo para la energía limpia, y legislaciones y políticas fuertes que limiten la contaminación causante del calentamiento global y estimulen una [R] evolución Energía.
La expedición del Esperanza puede seguirse en:
http://www.greenpeace.org.uk/files/gobeyondoil/index.html