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Greenpeace propone medidas concretas a los gobiernos para alcanzar las reducciones de emisiones recomendadas por los científicos

La organización presenta hoy un informe en el que se exponen las opciones que permitirían asumir los compromisos que eviten un calentamiento de 2ºC

Comunicado de prensa - junio 1, 2010
Greenpeace presenta hoy en Bonn La brecha de la gigatonelada (1), un informe en el que se recogen algunas de las ideas que permitirían asumir reducciones de emisiones capaces de mantener el calentamiento global por debajo de los 2ºC porque los compromisos actuales para 2020 son insuficientes para prevenir un cambio climático peligroso sin causar un colapso económico.

Pancarta humana con forma de energía eólica en Indonesia, el día de acción global contra el cambio climático.

El acto de presentación del informe, que tendrá lugar esta tarde durante las negociaciones sobre el clima que empezaron ayer en Bonn, ha contado con la presencia de expertos climáticos mundiales y de los representantes de Corea del Sur y de los Estados Federados de Micronesia.

Greenpeace advierte de que los compromisos que recoge el Acuerdo de Copenhague darán lugar a un calentamiento global de más de 3ºC (basándose en los niveles preindustriales), lo que situaría al planeta en un escenario de impactos catastróficos y de riesgo elevado de superar los puntos de inflexión que provocarían una reacción de impactos en cadena, como es, por ejemplo, el colapso del manto glaciar de Groenlandia. Para evitarlo, es necesario no superar los 2ºC o incluso 1,5ºC como reclaman más de 100 países en vías de desarrollo que se cuentan entre los territorios más vulnerables a los impactos de la crisis climática.

La organización recuerda que, según las recomendaciones científicas, si queremos tener una probabilidad del 25% de mantener el aumento de la temperatura global por debajo de los 2ºC, tenemos que limitar las emisiones de CO2 del periodo 2000-2050 a 1.500 gigatoneladas (Gt) de las que ya llevamos emitidas una tercera parte.

"Los gobiernos no están viendo todas las soluciones que tienen a su disposición para asumir este reto y, en cambio, se limitan a escuchar las excusas que el lobby industrial presenta para intentar evitar un aumento de los compromisos de reducción de emisiones", ha declarado Kaisa Kosonen, asesora política de Greenpeace Internacional en las negociaciones climáticas.

En el informe que presentará Greenpeace esta tarde se pone de manifiesto que si los gobiernos posponen las reducciones drásticas de las emisiones para después de 2020, será prácticamente imposible reducir las emisiones y mantenernos por debajo de los 2ºC. Según la organización ecologista, retrasar la acción:

• Provocará un colapso de las emisiones globales poco después de 2020, con enormes repercusiones económicas y sociales.

• Permitirá al lobby de los combustibles fósiles seguir impulsando la construcción de nuevas infraestructuras de generación de cambio climático durante los próximos diez años, teniendo en cuenta que más de la mitad de las fuentes que deben cubrir el suministro energético en 2020 todavía tienen que ser construidas.

Greenpeace se pregunta si no sería mejor avanzar la acción, evitar gastos innecesarios y construir las infraestructuras energéticas que la crisis climática y la escasez de combustibles fósiles recomiendan.

"Los líderes mundiales reconocieron en Copenhague que estamos ante una emergencia climática y no deja de ser incoherente que no haya un plan de emergencia. Lo primero que hay que hacer, como ante cualquier problema, es reconocer su existencia y, en este sentido, los gobiernos deben empezar a reconocer públicamente que la dependencia económica de los combustibles fósiles debe terminar antes de 2020" ha añadido Aida Vila, responsable de la campaña Cambio climático y Energía de Greenpeace España.

A continuación se resumen algunas de las soluciones que Greenpeace propone en su informe:

  • Que los países industrializados asuman un objetivo incondicional de reducción de emisiones del 30% para 2020 (como primer paso hacia el 40% que recomienda la ciencia del clima).
  • Que se eviten las trampas que ofrecen algunos mecanismos previstos en el Protocolo de Kioto como, por ejemplo, el permiso para trasladar los derechos de emisión sobrantes al siguiente periodo de compromiso de Kioto de forma gratuita y obtener beneficios netos de su venta o el establecimiento de reglas fraudulentas en el cómputo del CO2 no emitido gracias al uso adecuado del suelo o la deforestación evitada.
  • Que los gobiernos apuesten por reducciones de emisiones efectivas en el territorio nacional y que los mecanismos de compensación funcionen como forma de alcanzar reducciones de emisiones adicionales.
  • Que los países en vías de desarrollo asuman compromisos superiores a los que han presentado hasta ahora, porque pueden hacerlo si cuentan con el apoyo necesario.
  • Que se alcance el compromiso de poner fin a la deforestación tropical y al drenaje y la quema de las turberas.

Nota:

(1) Informe disponible en http://www.greenpeace.org/espana/reports/100501

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