Las organizaciones ecologistas Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife, ATAN, Amigos de la Tierra y Ben Magec-Ecologistas en Acción, se han unido contra la propuesta de nuevo Catálogo Canario de Especies Protegidas, presentado por Coalición Canaria, y actualmente en fase de trámite parlamentario.
Por un Parlamento que proteja el Medio Ambiente.Por este motivo, las ONG animan a la ciudadanía canaria a participar en una gran Cadena Humana el próximo sábado, día 28 de noviembre, y que rodeará la sede del Parlamento de Canarias con un perímetro de seiscientos metros.
Por este motivo, las ONG animan a la ciudadanía canaria a
participar en una gran Cadena Humana el próximo sábado, día 28 de
noviembre, y que rodeará la sede del Parlamento de Canarias con un
perímetro de seiscientos metros. El fin de este acto simbólico es
solicitar la retirada del nuevo Catálogo de Especies Amenazadas y
su sustitución por uno consensuado con las autoridades técnicas y
científicas en la materia, y exigir para Canarias un Parlamento que
proteja el medio ambiente.
El nuevo catálogo desprotege de diferentes maneras a 341
especies que en el actual Decreto Legislativo 151/2001, de 26 de
junio, gozan de un tipo de protección mucho más acorde con su
situación real de amenaza. De hecho, muchas de las especies a las
que se les pretende rebajar su categoría de protección han visto
empeorar su estado de conservación y sus hábitats en los últimos
años.
Basta algunos ejemplos como el del gorrión chillón (Petronia
petronia) y la abubilla (Upupa epops), cuyas poblaciones han
disminuido; el guincho (Pandion haliaetus), cuyo crecimiento de la
población se ha estancado desde la fecha de creación del actual
catálogo; especies emblemáticas y consideradas símbolos de la
naturaleza canaria, como el drago (Dracaena draco); o la seba
(Cymodocea nodosa), cuyo hábitat corre tal peligro que la urgencia
de su protección motivó la movilización de los más prestigiosos
científicos canarios, cristalizada en la solicitud de su
nombramiento como "Hábitat de interés prioritario" dirigida al
Ministerio de Medio Ambiente.
Los grupos convocantes querieren destacar la absoluta falta de
rigor científico en la elaboración de este nuevo Catálogo. La
propuesta emanada del grupo parlamentario adolece de la falta de
informes técnicos de los propios organismos medioambientales del
Gobierno autonómico, de las universidades canarias, y de cualquier
otro organismo científico con capacidad para evaluar realmente el
estado de conservación de los ecosistemas canarios.
El propio Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), en
su resolución del 4 de marzo de 2009, en la que suspendió las obras
del puerto de Granadilla, aludió con énfasis a "la falta de rigor
científico en la descatalogación del sebadal", que el Consejero de
Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, Domingo Berriel, firmó y
autorizó para permitir la construcción del Puerto de Granadilla.
Ahora se pretende cambiar la categoría de todo el conjunto de
especies canarias con la misma falta de rigor científico.
Las organizaciones coinciden en valorar que esta Ley, junto a la
nueva Ley de Medidas Urgentes, y el progresivo debilitamiento de la
Consejería de Medio Ambiente, tienen el objetivo de eliminar
cualquier barrera a la política de desarrollo insostenible prevista
para Canarias.
Concretamente, el nuevo Catálogo de Especies Protegidas se
convierte en el único instrumento posible que permite eludir la
actual sentencia del TSJC que paraliza las obras de construcción
del puerto de Granadilla, al convertir a la seba en una especie "de
interés para los ecosistemas canarios". De este modo, se puede
destruir el sedabal con la excusa del supuesto "interés general"que
tiene este puerto, ya que en este emplazamiento la seba no está
protegida en la Red Natura 2000 y en su LIC "Sebadales del
Sur".
De la misma manera, se actuaría con el puerto de Fonsalía, en
Tenerife, el puerto de Agando, en Fuerteventura, y por extensión,
con el anillo insular de Tenerife, la autopista exterior, los
puertos deportivos previstos, el campo de golf de Tamanca (que
afecta al cigarrón palo palmero, Acrostira euphorbiae, endémico de
La Palma, existente en sólo unas pocas localidades de la Isla y muy
amenazado), y un largo etcétera de obras previstas y paralizadas
por afectar a valiosas especies y ecosistemas.