Comunicado de prensa - septiembre 18, 2009
Mientras los líderes mundiales se disponen a asistir a la reunión del G20 en Pitsburgo (EEUU) la próxima semana, los líderes de Unión Europea han pedido, en una Cumbre extraordinaria, una financiación de emergencia para permitir que los países en vía de desarrollo se preparen para actuar frente al cambio climático.
Un día antes de comenzar la Cumbre del G8, activistas de Greenpeace demandaron la necesidad urgente de actuar frente al cambio climático con un iceberg de tamaño real flotando en el río Sena. En la pancarta se lee ‘SARKOZY: LIDER DEL CLIMA AHORA’ and ‘G8: LÍDERES DEL CLIMA YA’.
Los jefes de Estado y de Gobierno europeos, reunidos anoche en
Bruselas, quieren que los países ricos distribuyan 5-7 mil millones
de euros anualmente antes de que el futuro tratado de clima de
Copenhague tenga efecto en 2013. El propósito de esta financiación,
propuesta por la Unión Europea, es ayudar a que los países
empobrecidos puedan abordar los desafíos urgentes del cambio
climático.
"A falta de 80 días para Copenhague, la Unión Europea ha
avanzado en su posición negociadora y envía un claro mensaje a los
líderes de las naciones ricas que asisten el G20 en Pitsburgo la
próxima semana. Ahora que la Unión Europea y Japón finalmente
muestran algunos signos de progreso sobre cambio climático, el
presidente Obama pronto se verá obligado a actuar", ha declarado
José Luis García Ortega, responsable de la campaña de Cambio
Climático y Energía de Greenpeace.
Notas
1. La semana pasada, la Comisión Europea propuso que, dentro del
acuerdo de Copenhague, la Unión Europea debería contribuir
anualmente con 2-15 mil millones de euros a los países en vía de
desarrollo para 2012-2020. La intención de estos fondos es ayudar a
que los países en vías de desarrollo desarrollen energía limpia y
eficiente, protejan los bosques y se adapten al cambio climático.
Lamentablemente, esta propuesta no ha sido mejorada por los líderes
europeos.
Greenpeace hace un llamamiento a la Unión Europea para que se
comprometa durante sus reuniones de octubre de los Consejos de
ministros de Economía y de Medio Ambiente, así como por los jefes
de Estado, a 35 mil millones de euros que deberían ser adicionales
a la ayuda al desarrollo actualmente disponible. En conjunto, todos
los países industrializados deberían hacer honor a su compromiso
con la lucha contra el cambio climático aportando al menos 110 mil
millones de euros anualmente. Los fondos deberían ser gestionados
por un sistema de financiación respaldado por la ONU, que requerirá
que cada país pague por sus emisiones.
2. Ver también el informe de Greenpeace y Oxfam que informa
sobre la financiación de la lucha contra el cambio climático y las
negociaciones de camino a Copenhague:
http://www.greenpeace.org/eu-unit/press-centre/policy-papers-briefings/paying-climate-bill-10-09-09