Campo de maíz transgénico en Zaragoza
"Una vez más la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria ha
ignorado las evidencia científicas sobre los efectos negativos para
el medio ambiente del maíz pesticida de Monsanto. La confianza
ciega de la Comisión Europea en la opinión sesgada de la EFSA
preocupa enormemente a aquellos países concienciados con los datos
científicos disponibles sobre este maíz", ha afirmado Juan-Felipe
Carrasco, responsable de la campaña de Transgénicos.
Doce Estados de la UE han expresado recientemente su enorme
preocupación acerca de la seguridad de este maíz transgénico y seis
han prohibido su cultivo en sus respectivos territorio. (1)
Científicos independientes han protestado por los graves
defectos del informe de solicitud presentado por Monsanto y sobre
la calidad del trabajo de la EFSA (2). En un movimiento sin
precedentes, 18 ministros de 12 países de la UE enviaron una carta
a la EFSA en la que exponían sus preocupaciones científicas sobre
los efectos del maíz MON 810 en determinadas especies de insectos.
(3). Incomprensiblemente, la opinión publicada por la EFSA muestra
que estas evidencias no se han tenido en cuenta.
En diciembre de 2008, los ministros de medio ambiente de la UE
por unanimidad pidieron una revisión del proceso de autorización de
los cultivos transgénicos y una mejora sustancial en la manera en
que la EFSA evalúa los impactos de estos cultivos en el medio
ambiente y en la salud. Lo sorprendente es que la propia EFSA
reconoce que actualmente no está en una posición de evaluar los
efectos a largo plazo de los cultivos MG, como requiere la
legislación europea. La Comisión ha dado un plazo a la EFSA hasta
abril del 2010 para que mejore su capacidad para evaluar los
impactos a largo plazo.
"¿Cómo puede la EFSA presentar una opinión positiva sobre el MON
810 cuando públicamente ha reconocido su incapacidad para
determinar los impactos a largo plazo de los cultivos
transgénicos?", se ha preguntado Carrasco.
Greenpeace exige a la Comisión Europea que tome en cuenta las
evidencias científicas sobre los impactos negativos en el medio
ambiente y los efectos socioeconómicos del maíz MON810. Ningún
cultivo transgénico debería ser autorizado hasta que el proceso de
evaluación de riesgos se mejore y hasta que la EFSA esté preparada
para evaluar el conjunto de impactos de los cultivos
transgénicos.
Paralelamente, seis personas del colectivo Som Lo Que Sembrem
permanecen en huelga de hambre a las puertas Parlamento de Cataluña
en Barcelona para exigir al PSC, al PP y a CiU que retiren las
enmiendas a la totalidad a la Iniciativa Legislativa Popular (ILP)
presentada con el aval de 106.000 personas, 61 municipios y 4
comarcas. Esta ILP tiene, entre otros objetivos, declarar Cataluña
Libre de Transgénicos y prohibir nuevas aprobaciones de
transgénicos. "A la vista de las incertidumbres medio ambientales y
sanitarias y de las zonas de sombra en el proceso europeo de
aprobación de transgénicos, el Parlamento catalán tiene el deber
más que nunca de recoger el encargo de la sociedad y admitir esta
ILP a debate", ha añadido Carrasco.
Notas:
[1] Austria, Hungría, Francia, Grecia, Luxemburgo, y Alemania
han invocado la claúsula de salvaguarda y han prohibido el cultivo
del maíz MON 810. En marzo, 22 estados miembros rechazaron la
respuesta de la Comisión para abolir las prohibiciones existentes
en Austria y Hungría (entre ellos España).
[2] Listado de estudios científicos sobre los impactos en el
medio ambiente :
www.greenpeace.to/publications/Bt-maize-in-Europe-2009.pdf
[3] Además, la semana pasada, 11 países de la UE pidieron a los
ministros de medio ambiente que reconocieran el derecho de los
países a prohibir el cultivo de transgénicos debido a las
preocupaciones sobre sus efectos en el medio ambiente.