Página - noviembre 4, 2010
El carácter letal de los conflictos armados modernos pone de manifiesto las fatales consecuencias de la proliferación de armamento, especialmente de las armas ligeras.
En el mundo hay un arsenal cercano a los 640 millones de armas ligeras, es decir, una por cada diez personas.
El valor de las
exportaciones autorizadas de armas es de
21.000 millones de dólares al año. Pero éste no es todo el problema: se calcula que entre el 80% y el 90% de las armas ligeras ilegales proceden, originalmente, de una transacción autorizada y aprobada por un Estado.
Durante la Guerra Fría, gran parte de las transferencias de armamentos procedían de las dos grandes potencias militares (EE UU y la URSS), por
intereses comerciales o para rearmar a sus aliados en un contexto de enfrentamiento global. Actualmente el número de países que exportan armas ha aumentado, y esto aumenta el número de armas a disposición de los compradores y la dificultad de controlar el tráfico de las mismas.