Hoy acabamos de conocer los ganadores de unos premios muy especiales: los premios Public Eye.

Son premios que lejos de reconocer habilidades, triunfos y méritos, señalan las malas prácticas de las empresas, su falta de responsabilidad con el medio ambiente y con el derecho de las personas. Es una iniciativa que nació en 1999 para crear una crítica anual al Foro Económico Mundial que se celebra también en Davos (Suiza), una iniciativa liderada por la Declaración de Berna y por Greenpeace Suiza.

En la versión española los llamaríamos los Premios “Mirada Pública”, porque son las personas las que deciden qué empresa es merecedora de este premio a través de una votación online. Y una vez que hemos votado,  ¿cuáles han sido los resultados para 2013?

Los premios se dividen en dos: Los que da el público y los que decide un jurado y ambos se publican en el “Salón de la infamia”.

Y sin más preámbulos, damos paso a conocer a las empresas ganadoras:

Y el Premio del Público a la peor empresa del año es para…(ruido de tambores y expectación)... ¡Gazprom!
Y el Premio del Jurado es para… (ruido de tambores y expectación)...¡Gap!

Son premios bien merecidos. Gazprom, con casi 100.000 votos, es la primera empresa que ha comenzado a perforar el Ártico para extraer petróleo, destruyendo un hábitat único de interés planetario. ¡Esto no debe pasar! ¿Has firmado ya? Gazprom ha echado muchas papeletas para alzarse con el premio, tiene en su currículum 206 derrames de petróleo en yacimientos de petróleo en su propio país. Además de aproximadamente 2.000 vertidos de petróleo y productos tóxicos asociados como resultado de infraestructuras obsoletas. No olvidemos uno de los peores momentos que hemos vivido en Greenpeace: la detención de 30 activistas que de forma pacífica denunciaron a esta empresa al encaramarse en uno de sus barcos. Estuvieron 2 meses en una cárcel en Siberia.

El premio del Jurado ha ido a otra vieja conocida: GAP, con más de 44.000 votos.  La marca de moda se lleva el premio porque su producción textil está vinculada con la contaminación de los ríos de China, México e Indonesia. A través de la campaña Detox, hemos pedido que se comprometa a una moda libre de tóxicos, pero GAP ha rechazado tomar cartas en el asunto para asegurar que en la producción de las prendas no se usan sustancias químicas peligrosas que están afectando a nuestro medioambiente y a las comunidades locales que dependen de estos cursos de agua. Es fundamental una reforma de la industria textil. Las condiciones laborales y la protección del medio ambiente deben ir de la mano. Y sino recordemos el desastre del derrumbamiento del edificio del Rana Plaza en Bangladesh donde se confeccionaban prendas para grandes marcas internacionales.

Aunque han tenido más votos que GAP, el trío de Syngenta, Bayer y BASF se han quedado a las puertas con casi 60.000 votos y con un historial de más de 20 años produciendo y comercializando insecticidas que matan a las abejas y a otros polinizadores. Los estudios científicos confirmaron que algunos insecticidas afectaban a las abejas y, el año pasado, se prohibieron de forma parcial y temporal cuatro (imidacloprid, clotianidina, tiametoxam y fipronil) en la Unión Europea. Ahora estas empresas han demandando a la Comisión Europea por esta prohibición que protege a las abejas, de manera que pueden seguir siendo candidatas claras para la próxima edición de los Premios Public Eye 2015.

Había otras grandes empresas merecedoras de estos galardones, pero no hay para todas…

¡Enhorabuena a las premiadas!

Mónica Parrilla (@MonicaParrill), campaña de Ártico de Greenpeace