Greenpeace ha presentado hoy alegaciones al proceso de reapertura de Garoña, dentro del plazo de 10 días que el Ministerio de Energía nos ha dado a las 11 partes personadas en el proceso. Por eso hoy te invitamos a que te sumes a nuestra denuncia y le digas al @minetadgob y a su @MinistroNadal que queremos que la central nuclear de Garoña se desmantele.
Esperamos que el ministro, Álvaro Nadal, además de a las partes, te tenga en cuenta a ti, a la opinión mayoritaria del Congreso de los Diputados, y que no se olvide de que Iberdrola no quiere seguir.
Hace ya 6 años que Garoña cumplió los 40 años y tenía permiso de operación hasta julio de 2013, pero en diciembre de 2012 pidió el cese de actividad. Las inversiones en seguridad tras la catástrofe nuclear de Fukushima y las normas sobre fiscalidad energética estaban detrás de su final de operación. Pero en 2014 el gobierno aprobó un real decreto que, ¡oh sorpresa!, permitía a Garoña obtener una nueva autorización y pidió la ampliación hasta 2031. El pasado mes de febrero el Consejo de Seguridad Nuclear emitió un informe favorable que no deja que Garoña cargue combustible ni produzca electricidad, pero ahí está el ministro pensando si le da permiso.
Nosotros afirmamos que, en todo este tiempo, las empresas (Iberdrola y Endesa) y el gobierno han tomado decisiones totalmente contradictorias, han modificado reglamentos y normas para ampliar la vida de las nucleares (no solo la de Garoña) que el CSN ha emitido un informe deficiente, que no han tenido en cuenta el medio ambiente y la participación pública. Pero es que además reabrir Garoña supone que pagaremos el legado de residuos nucleares, y lo mejor de todo es que Garoña es prescindible, como hemos podido comprobar durante estos años desde que lleva parada. Sin duda lo mejor para Garoña es una buena clausura.