Pero…¿qué tiene que ver OSPAR, la Convención para la Protección del Medio Marino del Atlántico Nordeste, con las películas de cine?



Durante sus 23 años de existencia, OSPAR y sus delegados han jugado un papel fundamental, con decisiones audaces y positivas destinadas a proteger de la presión humana las aguas del Atlántico nororiental. Estas son las historias a las que OSPAR ha contribuido para dar un final feliz. El mismo final feliz que casi 7 millones de Defensores del Ártico alrededor del mundo están pidiendo para la película ”Salvar la primera parte del Santuario Ártico”

Decisión sobre desmantelamiento de plataformas de gas y petróleo: en 1998, a la vez que se aprobaban decisiones muy ambiciosas y progresistas para abordar la gestión de sustancias peligrosas y radioactivas, se acordó prohibir el desmantelamiento que desechaba al mar los restos de las plataformas de petróleo y gas. OSPAR también otorgó permiso para que existiesen observadores en las decisiones a todos los niveles técnicos, incluyendo organizaciones civiles como Greenpeace.

Áreas Marinas Protegidas: la ya protegida área marina de Charlie-Gibbs y otras 6 Áreas Marinas Protegidas adicionales, fueron establecidas por OSPAR entre 2010 y 2012 para proteger las caracterísitcas naturales únicas asociadas a la dorsal oceánica del Atlántico. Fueron las primeras áreas marinas protegidas establecidas en aguas internacionales de todo el Atlántico y la primera red mundial de áreas marinas protegidas en en alta mar.

La adopción de la Estrategia de Sustancias Peligrosas en 2003, que ha sido una contribución vital para el reglamento REACH que se aplica hoy en toda Europa, sobre todo en lo que se refiere a sustancias extremadamente preocupantes y a su sustitución.

Desde 2010, OSPAR se ha concentrado en dar un mayor enfoque a la evolución e impactos del cambio climático y la acidificación de los océanos, elaborando documentos sobre los efectos del cambio climático en el medio marino del Atlántico nordeste.

La próxima semana en Londres, los delegados de OSPAR tendrán la oportunidad de convertirse en auténticas celebrities de la mejor película para el planeta: un compromiso para una mayor protección del océano Ártico, el océano más desprotegido del mundo para protegerlo de sus amenazas. Y por supuesto no hay razón para que NO hagan esto: con la Convención Internacional sobre la Diversidad Biológica (de las que todos los países de OSPAR son firmantes) han listado a la región como “área bio y ecológicamente significante” después de una revisión exhaustiva de todos los países, y si OSPAR fallase traería nada más que vergüenza.

Un premio OSPAR significa la protección y el compromiso con el Ártico. De hecho, sería la mejor recompensa para el planeta porque el ecosistema del Ártico es esencial para la vida en la tierra tal y como la conocemos.

Es el momento que OSPAR haga historia. Una vez más.

¿Qué puedes hacer tú?
- Firma para pedir a los delegados de Ospar que se comprometan para proteger el Ártico.