Se acaba de conocer la noticia de que la Fiscalía ha archivado las diligencias que abrió por el hundimiento del pesquero ruso Oleg Naydenov en una zona de alto valor ecológico a 15 millas del sur de Gran Canarias.

Greenpeace considera que la Fiscalía no ha tenido en cuenta el impacto medioambiental causado en la zona a la que se llevó el pesquero en llamas cargado con 1.500 toneladas de fueloil, junto a un área declarada Lugar de Interés Comunitario.

En las aguas donde se hundió el Oleg Naydenov la plataforma submarina alcanza su máxima extensión y supone una de las áreas más productivas de Canarias. Este último hecho ha permitido el establecimiento de hábitats de interés como los sebadales o la de poblaciones de especies de interés comunitario. Además, en 2006 la Organización Marítima Internacional (OMI) otorgó al Archipiélago Canario la categoría de Zona Marítima Especialmente Sensible (ZMES) reconociendo la importancia ecológica y socioeconómica de la zona y su vulnerabilidad frente a los daños que ocasiona el tráfico marítimo.

Sin embargo la Fiscalía no parece haber tenido en cuenta las figuras de protección y la riqueza que aportan los espacios protegidos a la hora de autorizar el traslado del buque. En opinión de Greenpeace, si había riesgo de explosión, las autoridades del Puerto de Las Palmas deberían haber tenido planes de contingencia para minimizar los daños ambientales y no trasladar el buque de forma errática como hicieron.