Hoy el barco de Greenpeace Arctic Sunrise está en Barcelona, adonde ha llegado para seguir recordando la importancia de proteger el medio ambiente y denunciar las consecuencias sociales que provoca su destrucción.

Una visitante descubre los rincones del Arctic Sunrise durante su estancia en Barcelona. Pablo Blázquez

Y hoy queremos detenernos en el despilfarro de dinero público para proyectos contaminantes e infraestructuras inútiles. El proyecto Castor, que hemos denunciado esta semana, es uno de los casos más aberrantes, pero no es el único.

Como ejemplo, el gasto en infraestructuras inútiles ha alcanzado los 6.000 millones de euros entre aeropuertos, palacios de congresos, estaciones de AVE o líneas de tranvía sin un plan de viabilidad que justificara los graves impactos medioambientales que generaban.

Así, mientras la ciudadanía ha asistido a brutales recortes en servicios básicos como la salud o la educación, en 2014 el Gobierno presentaba su plan de rescate de autopistas radiales de peaje, que supone un riesgo para las arcas públicas de 3.400 millones.

Instalaciones de incineración de residuos, por ejemplo, conocidas por los problemas de contaminación y afecciones a la salud que provocan sus emisiones, también se alimentan de grandes inyecciones de dinero que ponemos toda la ciudadanía. Resulta indignante cómo al tiempo que se cierran hospitales, se respalda económicamente a empresas y se financian proyectos que tienen graves impactos en la salud.

Hoy en Barcelona seguimos diciendo una vez más que el medio ambiente importa. Reclamamos alto y claro que se ponga freno al despilfarro de fondos públicos para la destrucción de los recursos naturales, de nuestras costas y de nuestros espacios naturales. Y la ciudadanía está de acuerdo.

Colas en el puerto de Barcelona para visitar el barco Arctic Sunrise. Pablo Blázquez

Descubre el vídeo con la jornada de puertas abiertas en el Arctic Sunrise

Demandamos a los gobiernos que escuchen a la ciudadanía y se invierta en modelos de desarrollo sostenibles, se respalde a pescadores y mariscadoras artesanales, a quienes proponen alternativas de energía renovables, a agricultores ecológicos y a un largo etcétera de profesionales que intentan, con muchos obstáculos, llevar a cabo su trabajo de una manera sostenible que garantice la continuidad de sus sectores en el futuro.

No podemos seguir pagando compensaciones injustas a empresas o financiando las energías sucias con el dinero de todos, porque el medio ambiente importa.

¿Qué puedes hacer tú?
- ¡Mira ya los puntos más cercanos al lugar donde vives! y consulta el informe de Greenpeace “Radiografía social del Medio Ambiente en España”

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