Activistas de Greenpeace contra la madera ilegal

Greenpeace no cejará en su empeño de forzar a las autoridades para que certifiquen de manera clara y segura que la madera que utilizan no proviene de la tala ilegal, de la destrucción de los bosques primarios y de la extorsión de las comunidades locales.

12.30 horas.- En la rueda de prensa del Vicealcalde, Cobos aclara que exigirán a la empresa que les suministra la madera certificados que acrediten la procedencia de la madera.

12.15 horas.- Conseguimos hablar con Ana Botella en la calle, antes de meterse en el coche y nos promete una reunión para conocer mejor las fuentes que tenemos que demuestran que el mobiliario urbano procede de la tala ilegal.

12.00 horas.- Operarios municipales retiran los bancos del escenario de la acción y nos desplazamos a la zona posterior del Ayuntamiento donde va a tener lugar una rueda de prensa con el Vicealcalde, Cobos.

11.00 horas.- Empieza a llover y los activistas siguen con las pancartas sentados frente al Ayuntamiento. Hemos entregado cartas a los responsables de la contratación del mobiliario urbano pero no tenemos respuesta para concretar reuniones.

10.15 horas: Hoy hemos amanecido observando detenidamente la puerta del Ayuntamiento, en el centro de Madrid, justo entre la Cibeles y la puerta de Alcalá. Tan ilustre emplazamiento ha sido el escenario perfecto para que Greenpeace pida a Gallardón que se comprometa contra la tala ilegal. Entre las dos columnas del edificio del Ayuntamiento, 18 activistas, tres pancartas, una de ellas de 3 metros y medio que dice: "Madera ilegal, crimen forestal". 6 bancos del tipo "Madrid" completan en el escenario, ellos son el ejemplo de que el Ayuntamiento está utilizando madera ilegal en el mobiliario urbano de la ciudad, que pagamos todos los madrileños. Al mismo tiempo, otro grupo de activistas ha señalando los bancos próximos al Consistorio con la advertencia “No te sientes en madera ilegal”.

Desde la puerta del Ayuntamiento, Nadia González, web editor de Greenpeace

* Web especial Salvar los bosques Salvar el clima